miércoles, 16 de enero de 2013

Hostales: los mejores aliados

Estos son mis compañeros Honza y Jirka, al que apodamos "Xurxiño" (Xurxiño significa Jorgito en gallego, y Jirka es la versión checa de dicho nombre)


Mucha gente piensa que los hostales son sucios, peligrosos, incómodos... Todo eso es mentira. Me aclaro, puede haber algún hostal malo, pero también puede haber hoteles malos. Ir a un hostal implica un modo de alojamiento distinto, pero no por ello una rebaja en la calidad. En el hostal te relacionas con la gente, pudiendo encontrar allí compañeros que se unan a tu viaje mientras que en un hotel te aíslas del mundo exterior, cosa que buscan algunas personas, pero yo no estoy entre ellas. En el hostal también se ahorra, pero no solo con el alojamiento. También ahorras en la comida, al tener una cocina en la que poder cocinarte tu propia comida

Yo estuve en un hostal en Berlín y me encantó. Compartía habitación con dos compañeros de instituto (he de indicar que en ese momento era un alumno de intercambio en un instituto checo, en el que estudiaban estos chicos), teníamos una sala común con cocina, sofás y wifi. Y lo mejor de todo: había empleadas del hotel que eran de Latinoamérica y tres huéspedes españoles, por lo que la comunicación fue perfecta. El único inconveniente fue la cama. Era algo dura y preferí dormir en el sofá. También es verdad que soy un poco raro, duermo con más facilidad en sofas o coches que teniendo una cama convencional. Teniendo  en cuenta el precio, que era de 10€ para abajo, dependiendo del mes, si es día laborable, si se comparte habitación... me pareció un precio excelente.

En conclusión, usar un hostal reúne los objetivos de viajar como mochilero, que son conocer gente, la cultura local y ahorrar dinero.Por favor, comentad sobre experiencias que hayáis tenido en hostales.

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